En general, la repostería no es mi fuerte. No me gusta tener que respectar pasos y dosis, prefiero cocinar sintiendome libre de experimentar.
Tampoco soy amante de los glaseados y la pasta de azúcar, no me gustan las cosas demasiado elaboradas, ni coloreadas. Me encantan las donas y las natillas, menos la crema de mantequilla y los colorantes.
Sin embargo, desde que vivo en Madrid he tenido que empezar a autoproducir esos alimentos que me encantan y que ahora no encuentro fácilmente. Fue así que empeze’ una búsqueda compuesta por experimentos fallidos y frustraciones de una receta Parve (sin usar leche) de Cinnamon Rolls.
Me encantan, por su sabor y también por el hecho de que se conservan bien y pueden ser un gran snack para momentos de hambre repentina. Cuando las preparo, la casa huele a canela durante todo un día. Aquí está mi receta, fruto de fracasos y frustraciones.
Masa:
160 gr de leche de soja
1 huevo
50 gramos de margarina a temperatura ambiente
2 cucharadas de aceite de semilla
390 gr de harina
1 cucharadita de sal
1 cucharada de levadura seca
40 gramos de azúcar
Relleno
50 gr de margarina a temperatura ambiente
150 gr de azúcar moreno
2 cucharaditas de canela
1 huevo.
Cobertura
Medio vaso de azúcar
3 cucharadas de azúcar
La masa es súper sencilla, si la preparas con la planaria mezcla todo con el gancho por unos cinco minutos .
Si lo haces a mano, el truco está en ablandar la margarina con las manos y amasar un buen rato.
La masa tiene que subir hasta que doble su volumen.
En este punto, estirar la masa sobre una superficie enharinada y crear un rectángulo de unos 2 cm de alto.
Con las manos reparte la margarina por toda la superficie y luego cubre con el azúcar y la canela que has mezclado previamente.
Cortar en rodajas de unos 2 cm de altura y ponerlas a reposar sobre una placa de horno cubierta con papel de horno.
Precalentar el horno a 180 grados
Pincelar con la estufa y hornear durante unos 10 minutos. Mientras tanto, poner los ingredientes para la cobertura en una cacerola y calentar hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Tan pronto como los rollos de canela estén listos, cúbralos con glaseado.